- Cuéntanos un poco quién eres.
Mi nombre es Javier Blanco, soy el director general de Ebone, una empresa de servicios deportivos. Estudié INEF y me dedico a la gestión de servicios deportivos.
- ¿A qué se dedica la empresa?
La empresa básicamente trabaja con la administración pública, somos colaboradores de las administraciones públicas en la prestación de servicios deportivos. Lo que hacemos es licitar el contratar a través de contratos de licitación públicas, para poner personal, generalmente deportivo y que colabore en llevar adelante todos los programas deportivos con los ayuntamientos y entidades públicas que sacan a concurso.
- ¿Qué fue lo que te llamó a emprender?
Pues como suele ocurrir en muchas ocasiones, la casualidad. Porque cuando entré en INEF tenía muy claro que iba a ser profesor de Educación física, pero en el camino se cruzó… primero dar clases cada uno de su deporte, en mi caso, del tenis y a partir de ahí el gestionar escuelas de tenis y poco a poco por aprovechar una carrera como INEF, que es polivalente y que tiene un montón de disciplinas deportivas, pues empezar a gestionar otra serie de deportes.
- ¿Qué le dirías a los estudiantes sobre la experiencia de emprender?
Pues es una experiencia muy divertida, porque es divertida todos los días y continua. No es una meta que consigues y ya se terminó, y a partir de ahí, empieza a ser rutinaria. Porque el emprendimiento no termina nunca. Si tienes el espíritu estas todo el día innovando, por tanto, lo primero de todo es la diversión. Creo que es importante, vamos a pegarnos muchos años de la vida trabajando, por lo menos que sea divertido. Y la segunda, que yo creo que es la gran ventaja competitiva, es que nuestra carrera tiene del ámbito de inversión, es el ser capaces de aplicar todos esos valores del ámbito del deporte que nosotros hemos vivido, bien practicándolo y que en la facultad nos han enseñado además a trasmitirlo, interiorizarlo, a darle una metodología. Esos valores como el trabajo en equipo, como la resiliencia, como la capacidad de lucha y demás, son perfectamente compatibles con el emprendimiento y la gestión.
